ATTO SECONDO


(Giardino elegante. Un terrazzo, che dà a destra nei
giardino, ed al fondo sulla strada. A sinistra alcuni 
gradini conducono alle sale splendidamente 
illuminate di un sontuoso palazzo, da dove vengono 
gli echi di un'orgia sul finire. Nello sfondo vasta 
plaga solcata da corsi d'acqua argentei ai raggi 
della luna)

CORO
(interno)
Splendida notte, notte gioconda
E dolci olezzi mandano i fior.
Godiam la vita, godiam!
D'argentea luce
La luna inonda
La terra e il ciel.
Godiam la vita,
Doman si muor!

(Edgar esce dalle sale e si aggira sul terrazzo,
con aria stanca e tediata)

EDGAR
Orgia, 
Chimera dall'occhio vitreo,
Dal soffio ardente
Che i sensi incendia,
Tu a me, dell'alta notte 
Nel glauco mister silente,
Invan ritorni.

Non più dai tuoi sguardi, 
Ammaliato sarà il mio cor!
Nè più m'avvince
A te la voluttà.
Me ho terror,
Del domani, del domani;
Un vigliacco terror,
Che l'onor mio
Combattere non sa!

O soave vision 
Di quell'alba d'april,
O vision, vision gentil 
D'amore e di splendor!
Nell'abisso fatal, 
Dove caduto io son,
Rimpianta vision, ah!
Te il mio pensiero 
Evoca sempre ancor,
Sempre, sempre ancor!

(come rammentando)

Sovra un sereno ciel 
Si disegna il profil,
Dolcissimo, 
Dell'angiol che mi amò...
Dell'angiol che mi amò!

(Tigrana scende sul terrazzo 
e si avvicina premurosa a Edgar)

TIGRANA
(andando ad Edgar)
Edgar... Edgar
Sulla tua fronte
Erran tetri pensieri...

EDGAR
Essi son neri
Come l'abisso immondo
Ove scesi con te!...

TIGRANA
Tu più non m'ami
No! No! No!
Tu più non m'ami!

EDGAR
La parola d'amor non profanar!

TIGRANA
Quel che sognavi un dì 
D'orgie e di baci
Sogno febbril, 
Donar io seppi a te.
Per sempre, il fato 
Ci unì intendi?
Un mendico lungi da me!

EDGAR
Taci, demonio!... Taci!...

TIGRANA
Dalla valle natia 
Perchè fuggir, perchè fuggir,
E la casa paterna incendiar?
Perchè incendiar?
Or la tua sorte è mia...
Tutto perdesti!

(avvicinandosi ad Edgar,
e fissandolo voluttuosamente)

Dal labbro mio suggi l’oblio
E a te il doman sorriderà...
Nuovi deliri di voluttà
A te darà la mia beltà!

EDGAR
Ogni velen, demon,
Tu chiudi in sen
Nè da te fuggir potrò?
Nè un raggio a me brillar vedrò?
Un raggio di sol di speme ancor?...
Ne mai da te fuggir potrò?...
Da questo abisso d'onta e d'orror
Fuggir potrò?
Ogni velen, demon,
Tu chiudi in sen!
Ah! Demon!

TIGRANA
Vano è lottar,
Il fato ci uni!
Ora il fato ci uni!
Dal labbro mio suggi l'oblio,
Ed il doman sorriderà.
Nuovi deliri a te darà
Di voluttà la mia beltà.
A te darà di voluttà
Nuovi deliri la mia beltà!

(suoni di tamburo e trombe poco lontani)

SOLDATI
(lontano, ma avvicinandosi)
Urrà!

EDGAR
Uno squillo marzial!

(andando a vedere)

Passa una schiera di soldati
Alla porta del castel

SOLDATI
Urrà!

TIGRANA
(raggiungiendolo)
Come sfavillan l'armi
Al raggio della luna!

EDGAR
(fra sè)
Ah, qual pensiero!
A me lo manda Iddio!

(affacciandosi)

Olà, soldati, sostate!
Una coppa di vino
D'accettare vi piaccia!
Stringer voglio la mano
Al capitan!

TIGRANA
(sospettosa, avvicinandosi a Edgar)
Or bene, che intendi far?

EDGAR
Mi lascia!

(Suoni trombe in distanza. Frank entra)

FRANK
(con sorpresa, riconoscendoli)
Tigrana!... Edgar!...

EDGAR
Frank!

TIGRANA
Frank!

FRANK
Perchè vol ancor
Sul mio cammin?

(fa atto d'allontanarsi)

EDGAR
(impendendolo)
Ah, no! Ah, no!
Fermati! M'ascolta!
S'io t'offesi, mi perdona!

FRANK
D'un amore abbietto, indegno,
Il tuo ferro mi guari!

TIGRANA
(Fra sè)
Perchè in lor non più lo sdegno?
Perchè prega Edgar così?

EDGAR
Fui colpevol,
Ma atroce fu la pena!

TIGRANA
(Fra sè)
Egli me sfugge!

EDGAR
Oggi salvami tu puoi!
Puoi spessar la mia catena!

TIGRANA
(Fra sè)
Mi sfugge!

FRANK
Io salvarti? Parla!
Aprimi il tuo cuore!
Palesa il tuo pensiero!

EDGAR
Per redimermi e combattere
Al tuo fianco io con te,
Con te voglio partir!

(Frank ed Edgar si abbracciano)

TIGRANA
(afferrando Frank, supplichevole)
Se è vero che un di m'amasti, 
Deh, non toglierlo a me!

FRANK
Mi lascia!
Ti disprezzo!

TIGRANA
(rivolgendosi supplichevole ad Edgar)
Ah, non abbandonarmi!
D'amarti io non creda
Come t'amo in quest'ora!
Viver senza di te
Più non potrei!

EDGAR
(altero)
Com'io saprò dimenticarti,
Tu pur mi scorderai!

(respingendola)

A te soltanto mi voto, o gloria!

EDGAR, FRANK, SOLDATI
(con entusiasmo)
Or la Patria sacra
In cuor ci sta!
Chi dà la vita
A lei giammai morrà!

TIGRANA
O della morte
O mio tu sarai!

(Edgar e Frank s'incamminano verso il fondo. Tigrana     
cerca fermare Edgar che ancora Una volta la respinge.
 Tigrana con gesto Minaccioso giura vendetta)
ACTO SEGUNDO


(Jardín elegante. Un balcón a la derecha que da  a unos
 jardines. Al fondo, una calle. A la izquierda unos 
escalones conducen a los salones espléndidamente 
iluminados de un suntuoso palacio, de donde llegan 
ecos de los cantos de una orgía a punto de concluir. 
Al fondo, un vasto paisaje surcado de corrientes de agua 
plateada iluminadas por los rayos de la luna)

CORO
(en el interior)
Noche espléndida, noche jubilosa,
con dulces fragancias que expelen las flores.
¡Gocemos de la vida, gocemos!
De luz argentina
inunda la luna
la tierra y el cielo.
¡Gocemos de la vida, 
que mañana moriremos!

(Edgar sale del interior y pasea por el balcón,
con semblante de cansancio y hastío)

EDGAR
¡Orgía!
Quimera de ojos vítreos,
que con un soplo ardiente
incendia los sentidos.
A mí regresas en vano,
de la profunda noche,
en el glauco misterio silencioso.

Nunca más tus miradas
hechizarán mi corazón.
Ya no me liga a ti
la voluptuosidad.
Pero tengo terror
del mañana, del mañana.
Un terror cobarde
que mi honor
no sabe combatir.

¡Oh, suave visión
de aquel alba de abril!
¡Oh visión, visión gentil
de amor y de esplendor!
En el abismo fatal
en el que estoy sumido,
visión añorada ¡ah!
mi pensamiento
no cesa de evocarte
siempre sin cesar.

(como rememorando)

Sobre un cielo sereno
se dibuja el perfil,
dulcísimo,
del ángel que me amó...
¡Del ángel que me amó!

(Tigrana baja al balcón y se acerca 
afectuosa a Edgar)

TIGRANA
(andando hacia Edgar)
Edgar, Edgar,
sobre tu frente
vagan sombríos pensamientos.

EDGAR
Sí, y son negros
como el abismo inmundo
al que bajé contigo.

TIGRANA
Ya no me amas.
¡No! ¡No! ¡No!
¡Ya no me amas!

EDGAR
¡No profanes la palabra amor!

TIGRANA
Yo supe cómo dar,
a quien un día soñaba
con orgías y besos,
un sueño febril.
El destino nos ha unido para siempre...
¿Entiendes?
¡Un mendigo serás lejos de mí!

EDGAR
¡Calla, demonio! ¡Calla!

TIGRANA
Del valle nativo,
¿por qué huir
incendiando la casa paterna?
¿Por qué incendiarla?
Ahora estás en mis manos.
¡Lo has perdido todo!

(acercándose a Edgar 
y mirándolo voluptuosamente)

Toma el olvido de mis labios
y el porvenir te sonreirá.
Mi belleza te ofrecerá
nuevos delirios de voluptuosidad.

EDGAR
¡Escondes en tu pecho, demonio,
todos los venenos!
¿No podré nunca alejarme de ti?
¿No veré brillar más un rayo,
un solo rayo de esperanza?
¿No podré nunca alejarme de ti?
¿Podré huir de este abismo
de vergüenza y horror?
¡Escondes en tu pecho, demonio,
todos los venenos!
¡Ah! ¡Demonio!

TIGRANA
¡Es vano luchar
contra el destino que nos une!
¡Estamos unidos!
¡Toma el olvido de mis labios
y el porvenir te sonreirá!
Mi belleza te ofrecerá
nuevos delirios de voluptuosidad.
¡Nuevos delirios de voluptuosidad
mi belleza te ofrecerá!

(Sonido de tambores y trompetas a lo lejos)

SOLDADOS
(Lejos, pero acercándose)
¡Hurra!

EDGAR
¡Un toque marcial!

(acudiendo a mirar)

¡Pasa una compañía de soldados
por la puerta del castillo!

SOLDADOS
¡Hurra!

TIGRANA
(acudiendo junto a él)
¡Cómo relucen sus armas
bajo la luz de la luna!

EDGAR
(aparte)
¡Ah, qué pensamiento!
¡Dios me lo envía!

(asomándose)

¡Eh, soldados, deteneos!
¡Aceptad, por favor,
una copa de vino!
¡Quiero estrechar la mano
del capitán!

TIGRANA
(recelosa, acercándose a Edgar)
Y ahora, ¿qué pretendes hacer?

EDGAR
¡Déjame!

(Trompetas a lo lejos, Frank aparece en escena)

FRANK
(con sorpresa, reconociéndolos)
¡Tigrana!... ¡Edgar!...

EDGAR
¡Frank!

TIGRANA
¡Frank!

FRANK
¿Por qué volvéis a estar 
en mi camino?

(hace ademán de irse)

EDGAR
(impidiéndolo)
¡Ah, no!... ¡No!...
¡Espera!... ¡Escúchame!...
¡Perdóname si te ofendí!...

FRANK
Tu puñal me curó
de un amor abyecto e indigno.

TIGRANA
(aparte)
¿Por qué alberga únicamente desdén?
¿Por qué le habla Edgar así?

EDGAR
Fui culpable,
pero la pena fue atroz.

TIGRANA
(aparte)
¡Se me escapa!

EDGAR
¡Hoy puedes salvarme!
¡Puedes romper mis cadenas!

TIGRANA
(aparte)
¡Se me escapa!

FRANK
¿Yo, salvarte?... ¡Habla!
¡Ábreme tu corazón!
¡Revela tus pensamientos!

EDGAR
Quiero partir contigo
para redimirme y combatir
a tu lado.

(Frank y Edgar se abrazan)

TIGRANA
(agarrando a Frank, suplicante)
Si es cierto que un día me amaste,
no lo separes de mí.

FRANK
¡Déjame!
¡Te desprecio!

TIGRANA
(volviéndose suplicante hacia Edgar)
¡Ah, no me abandones!
Nunca creí amarte...
¡Te amo ahora!
¡Ya no podría
vivir si ti!...

EDGAR
(altivo)
¡Igual que yo sabré olvidarte,
también tú me enterrarás!

(rechazándola)

¡Sólo a ti me consagro, oh gloria!

EDGAR, FRANK, SOLDADOS
(con entusiasmo)
¡Ahora la sagrada patria
habita en nuestros corazones!
¡Quien a ella da la vida
jamás morirá!

TIGRANA
¡Acabarás por ser mío
o por ser de la muerte!

(Edgar y Frank se dirigen hacia el fondo. Tigrana intenta
detener a Edgar, que vuelve a rechazarla. Tigrana jura 
venganza con un gesto amenazante)

Acto III